Nací en La Habana hace (unos cuantos) años, y mi abuela, peluquera de oficio, siempre soñó con que me convirtiera en pianista. Desde pequeña, me apuntó a clases de piano, y cuando llegó el momento, me presenté al Instituto Manuel Saumel, un precioso conservatorio que ha formado grandes figuras de la música cubana. Aprobé el examen de ingreso, pero no fui aceptada por falta de plazas.
Entonces, ingresé en la escuela Guillermo Tomás de Guanabacoa, donde me formé como pianista rodeada de compañeros cuyo tono de piel encajaba perfectamente con el mío. Años después, me gradué en el conservatorio Amadeo Roldán de La Habana.
Y la vida me tenía preparada una sorpresa: tiempo después, regresé al conservatorio Manuel Saumel, esta vez como profesora. Desde entonces, he puesto las manos de muchísimos niños sobre un piano por primera vez, y algunos de ellos son hoy figuras destacadas de la música cubana.
Por eso, a pesar de los muchos giros que ha dado mi vida, nunca he abandonado la docencia, combinándola siempre con mi faceta artística. Cada vez que voy a un concierto de alguna de las grandes bandas cubanas y paso al backstage, escucho la misma palabra: ¡Profe! Estos reencuentros con antiguos alumnos que hoy son grandes músicos le dan sentido a mi vida.
En 1998, inicié mis giras internacionales, desde Centroamérica hasta los Emiratos Árabes y España, a donde regresé varias veces. En mi última visita, vine para la inauguración de un complejo turístico llamado Habana Social Club, en el sur de Tenerife. Al terminar mi contrato, decidí quedarme en España de forma permanente. Me enamoré de esta tierra.
Y aquí me tienes, como una española más. Tal vez un poco más oscurita que el resto, pero orgullosa tanto de mi nueva nacionalidad como de ese "tonito" tan rico que llevo en la piel.
Ahora, mi objetivo es que, cuando suba al backstage de las grandes bandas de aquí, también escuche ese ¡Profe! de algún músico español. Y quién sabe, quizás seas tú, uno de los que hoy aprenden a amar la música conmigo en mis clases online, que aunque sean a través de la pantalla, ya me he encargado de hacerlas tan cercanas que casi puedo coger tu mano y ayudarte a formar ese acorde perfecto que hará brillar tu interpretación.